Con motivo de la Congregación General 2022 de los colegios con el carisma de Mary Ward, el IBVM nos escribe este comunicado poniendo en valor la misión compartida y el compromiso institucional de nuestros trabajadores y trabajadoras para la continuación de la misión de nuestra fundadora.
Querida comunidad educativa:
El Instituto de la Bienaventurada Virgen María ha comenzado la preparación de nuestra Congregación General 2022, un año en el que también celebramos los 200 años de la fundación de la rama irlandesa por parte de Teresa Ball. El carisma que Dios confirió a la Iglesia y al mundo a través de Mary Ward sigue vivo hoy y tiene sentido para muchas personas, consagradas y laicas, que ven en él un medio para hacer presente el Reino de Dios y transformar la realidad.
Desde hace unos años, desde la Misión Compartida de religiosas y laicos, nuestra presencia en los colegios es diferente, y juntos seguimos llevando adelante nuestro ideario y transmitiendo nuestros valores y espiritualidad.
Los distintos niveles de gestión, Equipo de Titularidad y Equipos directivos, así como los diferentes equipos que hacen funcionar un colegio, están llevados por personas laicas con un gran compromiso institucional que, desde su compromiso con la Iglesia, comparten nuestro ideario y misión. Un profesorado que dispone de nuestra confianza plena y junto al que compartimos la responsabilidad de continuar con el legado que nos dejó nuestra fundadora, Mary Ward, para educar a la juventud y responder a las necesidades de nuestro tiempo, siguiendo los valores de Libertad, Justicia, Sinceridad y Alegría que nos caracterizan.
Un legado que nos llama a formar a niños y niñas libres, educados en responsabilidad y diversidad, conscientes de la realidad y el mundo en el que viven, afirmando la centralidad de Jesús y el Evangelio, y guiándonos por nuestros valores. Como dice la Brújula de los Colegios Mary Ward –el documento que sirve de guía a los colegios CJ e IBVM en el mundo, aprobada en 2017 en Sudáfrica–, nuestros centros “abrazan la diversidad como reflejo de la maravilla de la Creación”, y todas nuestras acciones parten siempre de dos principios fundamentales: el respeto y acompañamiento a cada uno de nuestros alumnos y alumnas, y el rechazo a cualquier forma de discriminación. Porque queremos, ante todo, educar a personas felices y actuar “como una fuerza positiva para transformar la vida”.
Elena Cerdeiras
Provincial de España
Instituto de la Bienaventurada Virgen María
27 de mayo de 2021